Margarita Cedeño aboga por políticas públicas efectivas dirigidas a la salud mental en RD
La ex vicepresidenta de la República, doctora Margarita Cedeño, abogó por la implementación de políticas públicas dirigidas a la salud mental, al considerar que esta será una década donde se deberá fortalecer ese sector, debido a los trastornos que ha ocasionado en la población la pandemia del COVID-19.
Al participar en un programa de radio, Cedeño calificó la pandemia como una catástrofe que coloca a la salud mental en la lista de prioridades que el Estado debe abordar, con la elaboración de políticas efectivas en ese campo de la salud.
La ex vicepresidenta de la República insistió en que las secuelas de la pandemia en la salud mental de los ciudadanos debe ser una prioridad del sistema de salud, para elaborarse con el apoyo científico y técnico del Colegio Dominicano de Psicólogos y de la Sociedad Dominicana de Psiquiatría.
Sostuvo que para fortalecer la salud mental se requieren respuestas que, además de apoyo a la población, también se facilite el acceso a insumos, herramientas, programas de protección social y la articulación de políticas conjuntas del sector público.
“Lidiar con la pérdida de un ser querido, sobreponerse a la incertidumbre que genera la situación del COVID-19, enfrentar los retos económicos que traen las crisis de esta naturaleza o simplemente tener que adaptarse a un nuevo estilo de vida, son solamente algunas de las situaciones que pueden traducirse en el deterioro de la salud mental”, manifestó Margarita Cedeño.
Recordó que antes de la pandemia, la Organización Mundial de la Salud reportó que 264 millones de personas en el mundo sufrían de depresión, que alrededor de la mitad de los trastornos mentales empiezan a partir de los 14 años y el suicidio es la segunda causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años.
Detalló que, en países de ingresos medios como República Dominicana, entre un 76% y un 85% de los ciudadanos con trastornos mentales graves no reciben el tratamiento adecuado y que en muchos casos las personas ni siquiera tienen conciencia de la existencia de enfermedades mentales que, de no ser tratadas correctamente por profesionales, pueden resultar en serias limitaciones para el desarrollo personal y profesional.