Es la mayor protesta en Haití desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio. Los haitianos tomaron las calles el martes ante el aumento de la inseguridad en la isla.
La violencia y los secuestros de las bandas criminales han ido en aumento y han puesto de manifiesto la incapacidad del Primer Ministro Ariel Henry para enfrentarse a ellas.
«El pueblo haitiano está en peligro», dice este abogado. «Los abogados no pueden circular, y los pequeños comerciantes, el pueblo es víctima de secuestros y las autoridades están ausentes».
VIOLENCIA EN ALGUNAS ZONAS
Las manifestaciones se tornaron violentas en algunas zonas. En la ciudad sureña de Los Cayos, una persona falleció y otras cinco resultaron heridas, cuatro de ellos policías, en el asalto al aeropuerto, donde un grupo atacó e incendió un pequeño avión.
El primer ministro Henry condenó el incendio del avión a través de un mensaje de Twitter, en el que aseguró que ha instruido a los poderes públicos a tomar acciones contra los autores de «estos actos subversivos, para que sean severamente sancionados».
Las protestas y huelgas se han sucedido en las pasadas semanas. Esta última coincidiendo con el 35º aniversario de la Constitución haitiana.
ESCUELAS CIERRAN
La gran mayoría de las escuelas de la capital de Haití cerraron este martes sus puertas debido a la marcha convocada por organizaciones populares en protesta contra la violencia de las bandas armadas y la ola de secuestros en el país.
Algunas escuelas emitieron comunicados pidiendo a los padres que dejaran a sus hijos en casa este martes de cara a las manifestaciones.