Cerca del 11,2 por ciento de la población dominicana reside en asentamientos informales, sin acceso a servicios básicos como agua potable y electricidad, de acuerdo con un estudio de Naciones Unidas conocido hoy.
La investigación advierte que esas personas tampoco cuentan con conexiones para drenaje pluvial, en tanto alerta sobre el riesgo de vivir en sitios inseguros en un país afectado por fenómenos atmosféricos frecuentes a causa del cambio climático.
Al respecto, ese organismo indicó la importancia de contar con políticas públicas para solucionar necesidades tan elementales para cualquier individuo.
Datos de Naciones Unidas precisan que más de mil millones de personas en el mundo (de un total de ocho mil millones) moran en barrios marginales y otros asentamientos informales.
Cesarina Fabián, directora de Hábitat República Dominicana, sostuvo que “las políticas correctas pueden eliminar barreras, acelerar los esfuerzos individuales y abrir la puerta de un futuro mejor para muchas más personas que merecen la oportunidad de vivir en un hogar seguro».
Fabián apuntó que estas habitaciones se caracterizan por no contar con acceso a agua potable, ni a saneamiento; están levantadas sobre terrenos vulnerables, con materiales de muy bajo costo y en su mayoría con pisos de tierra.
Hábitat República Dominicana y sus socios presentaron este mes la campaña “Hogar es…”, la cual se propone modificar políticas nacionales y mundiales encaminadas a cambiar la vida de quienes residen en casas inadecuadas.
Alrededor de 201 mil 640 personas se han beneficiado de los programas de esta organización en este país caribeño, que se resumen en 40 mil 328 soluciones habitacionales mediante el apoyo con créditos para la construcción o mejoramiento de su vivienda.
Una nota publicada en el sitio de la Presidencia en febrero pasado indicó que más de 43 mil familias han sido favorecidas aquí mediante los programas “Dominicana se Reconstruye, Mi Vivienda y Familia Feliz».
El presidente Luis Abinader señaló en ese momento que con el plan “Dominicana Se Reconstruye” -el cual inició en septiembre de 2020-, se beneficiaron más de 20 mil hogares al cierre de 2022.
Con una población estimada en poco más de 11 millones de habitantes, se calcula que en el país hay cerca de 3,4 millones de viviendas.