La muerte de una gran cantidad de peces en la laguna La Sierra en la Bahía de Neyba, preocupa a las familias residentes en el municipio de Jaquimeyes y otros pueblos, ubicados en la cuenca baja del Yaque del Sur, particularmente a las que viven de la pesca.
La muerte de las especies marinas se las atribuye a la falta de agua dulce, la cual solo reciben cuando llueve. Esta situación se complica en temporadas de sequía como la que se registra en la actualidad.
Al no recibir agua dulce y fresca el líquido que tiene la laguna se calienta de una manera tan alta que ocasiona la muerte de los peces. Años atrás la fuente natural recibía agua del río Yaque, a través del canal Trujillo pero dejó de llegar.
En tal sentido, los comunitarios piden la intervención del presidente Luis Abinader y las autoridades del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), Instituto de Desarrollo del Suroeste (Indesur), los ayuntamientos de los pueblos de la cuenca baja del Yaque del Sur y el Consorcio Azucarero Central (CAC), que administra el ingenio Barahona.
“Sugerimos a estas autoridades unirse y construir un canal o instalar una tubería con una bomba de 12 pulgadas para llevar agua a la laguna desde el mar Caribe, distantes a unos 200 metros”, dicen los comunitarios, según la información de Heredia en Facebook.
Indican que con estas iniciativa en tiempos de sequía las aguas de la laguna La Sierra no se calentarían tanto, debido a que recibirá el agua dulce en época lluviosas.
“Esto no conlleva una inversión de dinero, por lo que las autoridades de las mencionadas entidades tienen la oportunidad de evitar que esta laguna desaparezca definitivamente, lo que será un duro golpe para las familias que desde hace años viven de la pesca”, dijeron comunitarios.
De esta laguna también se benefician con la pesca familias de Palo Alto, Fundación, El Peñón, Pescadería, Bombita, entre otras comunidades de la cuenca baja del Yaque del Sur.
Por Juan Francisco Matos / elCaribe