SANTIAGO.-Otras cinco personas fallecieron anoche tras ingerir alcohol adulterado en Esperanza, Monción y Villa Vásquez en la Línea Noroeste, incrementado a 20 el número de víctimas mortales con otros 15 decesos ocurridos en las pasadas 24 horas en Navarrete, Villa González, Moca, Licey al Medio y esta ciudad.
Esta mañana la Dirección Regional Noroeste de la Policía Nacional identificó a los muertos en el noroeste por intoxicación alcohólica como Serafina Mercedes Sosa, de 45 años; Ramón Antonio Rodríguez, de 70, Librado Velisario Rodríguez Polanco, de 48 años, la haitiana Dalina Pie, de 42 años, y Lorenzo Almonte Luna, de 62.
Ayer en el Hospital José María Cabral y Báez de esta ciudad, se confirmó el deceso en ese centro de salud Alejandro Almengó de León, Freddy Miguel Hernández, Octavio Manuel Hiraldo, Celestino Vargas y el haitiano Wilnan Delsis. Algunos de ellos residentes en Navarrete.
En Villa González se reportó la muerte de Mario Esteban Casimiro (el Maestro) y Andrés García Almonte (el Calpian), mientras que en Guací, Moca, se reportó el deceso de Berto José Bonilla Salas, en Pekín zona sur de Santiago murió, Altagracia Rosado López.
Esta mañana, familiares reportaron la muerte de Robinson Cabrera, cuyo cadáver era velado en su residencia del sector Los Robles en la parte oeste de la ciudad. Otras muertes por consumo de alcohol adulterado son las de Herminio José Fermín Aracena, Jacobo Rafael Gómez Muñoz.
En Licey al Medio fallecieron también, Juan Antonio Portes, Héctor Bienvenido Arias Portes, y José Estarlin Gómez Tavera a causa de intoxicación alcohólica.
Mientras que esta mañana, la Policía en la Línea Noroeste reportó la incautación de 133 botellas de alcohol marca “Peter Allen”, durante un operativo en colmadones de Valverde, realizado por agentes de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim), en compañía de miembros del Ministerio Público e inspectores de Salud Pública.
Ayer, el director médico del Hospital José María Cabral y Báez, doctor Manasés Peña alertaba del peligro que representa el consumo de alcohol adulterado.
“Si es metanol puro los efectos son más devastadores, el paciente comienza a tener confusión mental, dolor cabeza, nauseas, dolor de estomago, vómitos, algunos pueden presentar diarrea, visión borrosa, un daño muy severo a la retina y al nervio óptico”, apuntó Peña.
Advirtió que quienes sobreviven al consumo de bebidas adulteradas podrían quedar con secuelas neurológicas por el daño que ocurre a nivel cerebral.
“Pueden quedar ciegos, debilidades musculares porque se comporta como un ACV isquémico (accidente cerebrovascular)” explicó.